CREENCIAS LIMITANTES—2ª PARTE AQUÍ HAY GATO ENCERRADO… Y NO LADRA
No estar de acuerdo con la realidad = sufrir
Y a qué viene lo del “gato encerrado”…
Te puedes esforzar y entrenar magistralmente a un gato para que ladre, y cuando termines el gato te mirará a los ojos y te dirá: ¡Miauuu!
Cuando no aceptamos lo que es, la realidad que estamos viviendo, sufrimos. Y por lo general, sufrimos antes una realidad con la que NO estamos de acuerdo a raíz de una creencia limitante.
Y las creencias más nocivas pueden a veces ser las más aparentemente inocentes. Recuerdo que por muchos años de mi vida no me gustaron los días de lluvia. ¿El resultado? Los días de lluvia me ponían triste, acongojado, y me bajaban el ánimo. Eran deprimentes…
Recuerdo que un día mi hija mayor me comentó muy natural y jovialmente, «me encantan los días de lluvia». Y en otro momento mi hijo mayor me dijo lo mismo un día de lluvia que estábamos conviviendo. Le encantan los días de lluvia.
Se imaginarán lo que pasó… cambié de opinión, decidí que me encantan los días de lluvia, y ahora me encantan. No muy complicado, ¿verdad? Pero cuanto mejor, porque equivale a más alegría en mi vida.
Es que NO es complicado este asunto. Es una de las grandes virtudes que nos fue dada a los seres humanos. Podemos cambiar de opinión y cambiar una creencia, en un instante, para que nos sea más útil.
¿Cómo es posible que para una persona un día de lluvia sea deprimente y a la otra persona le encante? Es debido a la creencia que adoptaste en algún momento de tu vida. Así de sencillo.
Como dice la autora Byron Katie en «Amar lo que es», Sufrimos únicamente cuando nos creemos un pensamiento que no está de acuerdo con lo que es.
Desear que la realidad sea diferente de lo que es, es desesperante. Y aun así, si prestas atención, advertirás que tienes pensamientos de este tipo docenas de veces al día:
«La gente debería ser más amable», «Los niños deberían comportarse bien», «Mi marido (o mi mujer) debería estar de acuerdo conmigo», «Debería estar más delgada(o) o tener más éxito».
Estos pensamientos son formas de querer que la realidad sea diferente de lo que es. Si te parece que esto suena deprimente, estás en lo cierto. Todo el estrés que sentimos se origina cuando discutes con lo que es.
Nuestro intento por encontrar la felicidad está enrevesado: en lugar de intentar, inútilmente, cambiar el mundo para ajustarlo a nuestros pensamientos de como “debería” ser, podemos cuestionar estos pensamientos y, mediante el encuentro con la realidad como es, experimentar una libertad y un gozo inimaginables.
Cuando NO te identificas las creencias que te limitan abres un mundo de oportunidades… vale la pena.
Una sutil creencia limitante: Los días de lluvia son tristes.
- ¿Tus decisiones te impulsan a lograr más y en menos tiempo?
- ¿Tus creencias te ayudan a tener mejores relaciones?
- ¿Podrías lograr más concentrándote en las actividades más productivas?
El éxito es inevitable, siempre y cuando… tomes medidas eficientes y de manera constante.
Te invito a que trabajemos juntos para que identifiques tus creencias limitantes y tomes medias eficientes para aprovecharlas para bien. Como detonadores de cambios.
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Éxito: hacer lo que más deseas de manera intencional para obtener los resultados que más quieres.
¿Se te ocurre alguna creencia limitante que te esté afectando más de lo que quisieras? Escríbeme a AQUÍ